Dario Lopilato y Rodrigo Guirao Diaz

Dario Lopilato y Rodrigo Guirao Diaz
Dos que tuvieron que remar


Los jóvenes actores toman distancia de sus apellidos y aseguran haber peleado mucho para trabajar en TV. Dicen que el rating de Atracción x 4 –tira que protagonizan– se vio afectado por la época del año en que comenzó. Sus relaciones con Luisana y Rocío.
Por Diego Grillo Trubba


Cambios. El ciclo de Canal 13 no rindió lo esperado y hubo cambios en el argumento. El peso recae sobre ellos.

El mundo del espectáculo brinda sorpresas. Cuando se estrenó, en noviembre, Atracción x 4 estaba protagonizada por el “Puma” Goity, Carola Reyna y Jorge Suárez, a quienes secundaba un elenco de jóvenes, entre quienes se destacaban Luisana Lopilato, Camila Bordonaba, Darío Lopilato y Rodrigo Guirao Díaz. Sin embargo, los números de rating no rindieron y la productora Ideas del Sur decidió dar un volantazo. El resultado: los adultos pasaron a ocupar un lugar secundario y los jóvenes se transformaron en protagonistas.

—¿Cómo se tomaron el hecho de que a partir de ahora el peso de la tira recaiga sobre ustedes?

LOPILATO: Es difícil. Me lo tomo con seriedad y responsabilidad. Trato de encararlo como se debe. Si vos ves el personaje tal como empezó y el que hago hoy, parecen dos distintos.

GUIRAO DIAZ: Ahora laburo como si fuera otra novela con los mismos personajes. El tono cambió mucho.

—Decís que se trata casi de otra tira. Los números de rating también son muy distintos...

GD: Sí, por suerte levantó un poquito.

—¿Tuvieron miedo con la baja audiencia del comienzo?

GD: La sensación era rara. Nosotros sabíamos muy bien que era un programa que arrancaba a fin de año, que no era un momento como para hacerlo, compitiendo con finales de telenovelas afianzadas por haber estado todo el año. Yo sabía que el momento no era el mejor, porque encima pegado a eso, estaban Navidad y Año Nuevo, y después la primera quincena de enero. Siempre quedó la esperanza de que cuando pasara enero se iba a definir el partido.

—¿Y cómo creés que se va a definir?

GD: Yo creo que el programa está levantando de a poquito. La verdad, ahora todo el mundo está en la playa. El cambio de la hora también nos perjudica, porque salimos a las siete de la tarde y el sol está a pleno. Si con todo eso en contra, estamos midiendo 8 puntos y pico, bueno, en febrero o marzo debería ser otra historia. Además está el asunto del encendido general de la televisión, que es bajísimo. Con más encendido le tengo fe.

—Hablando de etapas distintas para un mismo ciclo, Darío, vos estuviste en “Casados con hijos”, que la primera vez que se emitió no fue un éxito, y luego empezaron las repeticiones y el público respondió... ¿Acá también podría haber dos etapas?

L: Es verdad, el éxito en Casados con hijos fue con las repeticiones. Capaz que Atracción x 4 termina siendo un éxito, no se sabe. Lo cierto es que hoy estamos dando batalla.

—Estás por primera vez en una tira juvenil...

L: Sí. Casados con hijos era familiar. Así, juvenil como está, es la primera. Lleva mucha responsabilidad, porque encarás un público distinto. Si bien a mí me encanta la comedia, acá mi personaje me permite hacer otras cosas, porque sufre demasiado, le pasan cosas terribles.

—¿Cómo es el público de la tira juvenil?

L: Difícil. O te aceptan o no. O te quieren o no te dan pelota. El público de chicos es así. Otros te dan un tiempo pero los chicos no.

—Sí, pero se han transformado en dos íconos masculinos para las adolescentes...

GD: Lo noto en la calle y me pone contento. No fue algo en lo que yo trabajé. No sé si era mi idea pero la gente me puso en ese lugar, o sea que le gustó eso. Y gracias a eso tengo trabajo, y encima de lo que me gusta. Es lindo. Sé que lo tengo que aprovechar ahora porque no sé cuánto tiempo más podré llevarlo. Con los años ya vendrán otro tipo de papeles.

—¿Y las fans? ¿Cómo se llevan con ellas?

GD: Están siempre en la puerta del canal. A mí me gusta tener perfil bajo pero nunca negarle nada a nadie, dedicarle tiempo a alguien por más chiquito que sea: devolver lo que me dan. La gente que me conoció en la calle sabe que es así y se sorprenden porque están acostumbrados a que los personajes se comen a los actores. Creo que me lo tomo así porque empecé a trabajar en esto de grande. Tuve muchos otros trabajos, me formé como persona, gané sueldos muchísimos más chicos trabajando muchas más horas. Empecé a los 24 años y hoy tengo 29. Cuando arranqué, creo que ya tenía un par de cosas en claro y no se me fue tanto la fama a la cabeza. Algo me debe haber modificado, seguro, pero creo que bastante poco.

—Darío, ¿cuál es el secreto de haber logrado transformarte en algo más que el hermano de Luisana?

L: Hubo que hacer un largo camino. Ella tuvo la suerte de empezar en una productora y arrancar teniendo trabajo. A mí me tocó la otra cara: golpear puertas, llevar currículums, ir a castings: el petisito la tuvo que luchar. Pero el no haber entrado de entrada a una tira de adolescentes, me permitió hacer otras cosas, trabajar con grandes actores como Juan Leyrado, Enzo Viena, Luisina Brando, Arturo Puig. Cada uno me dejó su marca y me permitió aprender en pocos años la profesión. Vos fijate que para Casados con hijos entré por casting y no por ser el hermano de Luisana. La remé mucho.

GD: Yo empecé con la música. En 2000, 2001, tocaba en el Hard Rock Café, pero la verdad que no cobraba un peso y lo tuve que dejar.

—También fuiste promotor de viajes de egresados...

GD: (se ríe) Eso fue una chantada. Trabajé un par de meses pero más que nada para bancarme el viaje de egresados. Tuve mil quinientas changas.

—Darío, ¿cómo es la relación con tu hermana?

L: Increíble.

—¿Sos celoso?

L: No, de Luisana, no. Somos muy amigos.

—¿Y ella de vos?

L: Y... (se encoge de hombros).

—¿Son de salir juntos?

L: Sí, claro, a veces salimos ella con su novio y yo con la mía. Hacemos muchos planes juntos.

—Si se pelea con un novio, ¿es de llamarte para llorar?

L: No, ni siquiera. Luisana es alguien que esconde muchísimo su melancolía, cuando la tiene. Sí me llama cuando tiene que elegir laburos. Por la edad que tiene, asume muchas responsabilidades. Quizás entre los dos nos aconsejamos, vemos qué conviene hacer. Está bueno tener de hermana a alguien que sabe.

—¿Algún novio de ella te cayó mal?

L: No, la verdad que no. Yo soy una persona que es muy difícil que se lleve mal. Si está todo bien, está todo bien. Si dañan a alguien de mi familia, soy el peor.

—Vos sos evangelista...

L: Creo en Dios.

—¿Cómo se lleva el evangelismo con ir a boliches o que las fans te persigan?

L: Depende de cómo te lo tomes. Yo creo en Dios, pero llevo una vida normal. Puedo ir a un boliche, puedo tomar algo. No soy religioso. Quizás tengo mis momentos a solas con Dios, pero me lo tomo bien.

—¿Sentís que alguna vez se burlaron por tu fe?

L: Lo que pasa es que la gente no sabe. Ser evangelista es dar las buenas nuevas. El evangelismo ni siquiera es una religión. Como la gente desconoce, puede decir cosas. Yo creo en Dios y punto. No es que quiera venderle una religión a nadie.


Con la ayuda de Araceli

—¿Cuándo conseguiste tu primer trabajo como actor?

—En el programa Media falta. Era la primera vez que tenía contrato, un personaje que arrancaba desde el primer capítulo y no simplemente un bolo. Después estuvo Amas de casa desesperadas, donde me conoció un público más masivo.

—Hubo momentos fuertes.

—Sí, nada que ver con Media falta que era de adolescentes.

—¿Eran difíciles las escenas de sexo con Araceli?

—No, para nada. Es una buena mina, excelente compañera de trabajo... Yo tenía cero experiencia en el oficio y ella y los directores me ayudaron muchísimo para que yo estuviera a la altura de las circunstancias.

—¿Te sentís más modelo, actor o músico?

—Siento que ahora estoy trabajando de actor. Fui modelo, claro y si sale algún trabajo lo voy a hacer, pero siempre y cuando esté relacionado con la novela en las que esté actuando. La música es un hobby que no necesito que se desarrolle. Es mi cable a tierra, es algo que amo.

—¿Cómo te llevás con tu prima Rocío?

—Siempre nos llevamos muy bien, desde chicos. Nos vemos cuando los laburos nos lo permiten.

Lopilato por dos

—¿Cómo te sentís con las repeticiones de “Casados con hijos”?

DL: No sé. Ese programa fue el primer amor.

—¿No te perjudica estar en dos pantallas a la vez?

DL: Si hacés algo diferente, no. El personaje que hago en Atracción x 4 no tiene nada que ver con Coqui. Es más dramático, ahora le va a aparecer una hija...

—¿Te pagan por las repeticiones?

DL: Cada vez menos. Cada repetición te pagan menos que la anterior, es una locura. Igual, nunca se sabe, en una de esas todo esto te abre puertas de laburo. El otro día un amigo me decía que vio el programa en Miami y es un éxito. Eso quizás te va abriendo el panorama de laburo. Por ahí, te da un poco de bronca que los programas te encasillen y no puedas mostrar otras cosas, pero por suerte acá justo hago algo que nada que ver.

—¿Te pagan por asistir a los boliches?

DL: Hoy no, ya hace un tiempo que no. Pero lo hice. Es una salida importante. Por ejemplo, con las repeticiones de Casados con hijos vos me ves en pantalla y pensás que estoy trabajando, pero la verdad es que no cobro casi nada. Cuando estás parado, el tema de los boliches ayuda.

Spoiler:

ojala la novela sube en el rating para que siga
nose pero yo le tengo Fe a ATRACCION X 4

ALGO VA A PASAR y la novela va a levantar su rating

este jueves le gano los simpsos noooooooooooooo

thnx for info